(De todas maneras tenemos que estar felices con este regreso.)
Dos años después de Move Along, AAR regresa y nada descubrimos si decimos que Nick Wheeler y tyson Rytter son una dupla compositiva increíble.
Cuántas veces creímos haber encontrado la verdad aunque haya múltiples itnerpretaciones, cosas que heredamos, cosas q nos olvidamos y cosas que creíamos profundamente dormidas dentro nuestro... y un buen día salen de sus vacaciones ocultas en forma de canciones y surgen para molestarnos.
Ahora me doy cuenta del valor del silencio, me explico el valor de lo ausente frente a su nuevo disco y el tiempo que ha pasado, los cambios que se observan, todo lo que les ha ocurrido. Estas canciones hechas de memorias, de sensaciones, de deseos, de pasados, de presentes y de futuros alterados por lo que ya no fuimos. Cuando pensemos que el mundo se acaba, estas canciones con formas precisas se transforman en una suerte de reivindicación de cada una de nuestras emociones. Queda solamente el tiempo que se muere como un testigo mudo.
Dos años después de Move Along, AAR regresa y nada descubrimos si decimos que Nick Wheeler y tyson Rytter son una dupla compositiva increíble.
Cuántas veces creímos haber encontrado la verdad aunque haya múltiples itnerpretaciones, cosas que heredamos, cosas q nos olvidamos y cosas que creíamos profundamente dormidas dentro nuestro... y un buen día salen de sus vacaciones ocultas en forma de canciones y surgen para molestarnos.
Ahora me doy cuenta del valor del silencio, me explico el valor de lo ausente frente a su nuevo disco y el tiempo que ha pasado, los cambios que se observan, todo lo que les ha ocurrido. Estas canciones hechas de memorias, de sensaciones, de deseos, de pasados, de presentes y de futuros alterados por lo que ya no fuimos. Cuando pensemos que el mundo se acaba, estas canciones con formas precisas se transforman en una suerte de reivindicación de cada una de nuestras emociones. Queda solamente el tiempo que se muere como un testigo mudo.
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